El origen de las montañas

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Hace miles de años, cuando el primer inuit siguió al caribú a nuevas tierras, se encontró con tierras habitadas por dos tipos de personas.

Estaban los pequeños duendes que cabían en la palma de la mano y estaban siempre alegres y cantando.

Y estaban los Tuniqs, unos temibles gigantes que medían cinco veces el tamaño de un inuit.

Los Tuniqs eran violentos guerreros, y les gustaba capturar a los inuit para comerlos. Sin embargo su inteligencia no era tan desarrollada, y los inuit se las ingeniaban para esquivar sus ataques.

Pero un día, un cazador fue visto por un tuniq, quien comenzó a perseguirlo para devorarlo. Al ver esto, otro hambriento tuniq se suma a la persecución, y aunque el inuit era veloz y mucho más ágil que los gigantes, se vio atrapado por ellos.

Al no tener escapatoria, les pregunta el inuit: “¿Por qué quieren atraparme?” A lo que responden ambos al unísono: “Porque estoy hambriento y quiero comerte”. Entonces el inuit, haciendo uso de su astucia, les dice: “Sólo soy un pequeño inuit, ¡mi carne no sería suficiente para alimentar a dos grandes tuniqs! ¿Cuál de los dos me comerá?”.

Con esto ambos gigantes quedan estupefactos y comienzan a pelear su derecho sobre el pequeño inuit. “¡Yo lo vi primero!” “¡Gracias a mi lo atrapaste!”.

Luego de unos momentos de discusión, el inuit propone que ambos tuniqs luchen entre sí, y se ofrece voluntariamente para saltar dentro de la cacerola del vencedor.

Entonces comienza la lucha más terrible de la historia del hombre, días y noches completas los tuniqs se golpean y se arrojan al suelo. Y con cada golpe y estrellón en el suelo de la tierra, ésta se moldeaba, formando profundos valles, suaves colinas y grandes quebradas.

La pelea no cesó por muchos días, hasta que cayeron agotados con el último gran golpe de sus cuerpos. El inuit, que esperaba pacientemente el final de la lucha, cuando vio a ambos gigantes exhaustos, atravesó sus corazones con flechas y regresó a su poblado.

Miles de años después, cuando ambos gigantes y este astuto inuit habían desaparecido de la faz de la tierra, las montañas y los valles continuaron en su lugar, dando testimonio de la gran lucha de los gigantes.

Fuente: Mitología Inuit

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Algunas Actividades:

– Localizar quiénes son y donde vive el pueblo Inuit

– ¿Qué es un caribú?

– Dibujar o realizar en plastilina o arcilla como nos imaginamos a los persoanjes del cuento: el inuit, los duendes, los Tuniqs,…

– Contar este cuento con un tebeo o una presentación

– ¿Qué os parece la historia? ¿Os recuerda a algún otro cuento?

3 comentarios sobre «El origen de las montañas»

  1. El origen de las montañas
    gras me sirbio para sustentar la materia perdida hermosa pagina sace 50 gracias su pagina

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