Érase una vez un pueblo llamado Castejón de Sos y unas familias de la tertulia “Leer juntos” que con la complicidad de padres, madres, profesores, vecinos, escuela de música,… decidieron contar un cuento a los chicos y chicas del cole. Gracias a todos ellos pudimos pasar una tarde mágica.
El cuento elegido fue un clásico, “La Cenicienta”, en una versión libre que recorrió casas y calles de nuestro pueblo.
Como siempre las hermanastras y la madrastra hacían la vida imposible a la pobre Cenicienta.
Un día un paje llegó con una invitación para que acudieran al baile que se celebraría en el palacio del príncipe.
La pobre Cenicienta no podía ir al baile pero aparecieron sus hadas madrinas, Belisa y Melisa, que aunque un poco despistadas solucionaron todos los problemas.
Un hermoso vestido y sobre todo una bonita carroza para llegar al palacio.
En el baile las hermanastras y la madrastra lo estaban pasando genial bailando con el príncipe la dulce música que interpretaban los mejores músicos del reino.
Desde el momento en el que apareció en el baile Cenicienta, el príncipe ya sólo tuvo ojos para ella.
Pero a las doce en punto Cenicienta tuvo que marchar y el príncipe se quedo desolado porque se había enamorado. Encontró un zapato de Cenicienta y mandó a su paje por todo el reino para encontrar a su propietaria.
Fueron mucho las que se lo probaron pero a ninguna le iba bien….
… Por fin llegó a casa de las hermanastras y allí el príncipe volvió a encontrarse con su querida Cenicienta. Y colorín, colorado esta historia ha termindado.
la cenicienta
¡Enhorabuena por el trabajo! Seguro que lo pasasteis genial. Besos