LA BALA
Un niño iraquí de 4 años lleva tres semanas con una bala alojada en el pecho, los médicos iraquíes se sienten impotentes porque de momento no tienen el material quirúrgico necesario. El movimiento de bombeo de la sangre acerca cada vez más la bala a órganos vitales podría morir en cualquier momento si no es operado .
ALEXANDRA RODRÍGUEZ
CERLER.